DESARROLLO DE PROYECTOS ARQUITECTÓNICOS

El desarrollo de cualquier proyecto siempre inicia de forma global y termina con el detalle de cada aspecto, el proceso consta principalmente de la conciliación de los recursos con las necesidades de nuestro cliente.

Podemos definir las fases involucradas en el desarrollo de un proyecto.

Estudios preliminares. Es necesario procesar la información inicial que afectará directamente a nuestro proyecto.

o Requerimientos de nuestro cliente. (necesidades espaciales, funcionalidad, recursos económicos y financieros)
o Contexto del proyecto. (entorno natural y artificial)
o Normatividad. (Normas y reglamentos que regulan el tipo de proyecto a desarrollar así como las que regulan la zona donde se ubicará.)

Esquemas iniciales. Esta es una fase de búsqueda, imaginación, creatividad y exploración, esta nos arroja una diversidad de soluciones. Algunos de los factores que debemos tomar en cuenta son los siguientes.

o Eficiencia energética del edificio en operación.
o Forma y posición del edificio.
o Organización espacial.

Anteproyecto. Es el objeto que nos arroja el estudio de esquemas iniciales, en este ya se encuentra perfectamente definida la configuración espacial y gorma del edificio. Esta fase resulta de una retroalimentación continua entre el cliente y nuestra empresa, hasta que se llega a un proyecto definitivo que satisface al 100% todos las necesidades del proyecto.

Proyecto ejecutivo. Consiste en el desarrollo de documentos gráficos que contienen toda la información para la construcción del proyecto, esta etapa se caracteriza por ser el punto en donde intersecan todas las ingenierías involucradas en el proyecto, es una etapa de extrema importancia ya que todo lo que se plasme en los planos será la guía precisa para la construcción del proyecto. Es una etapa de alta aplicación de la ingeniería civil, los conocimientos y los estudios especializados realizados son plasmados en los planos constructivos del proyecto (diseño y cálculo estructural).

Supervisión de Obra. Este es uno de los procesos cruciales para el buen funcionamiento del proyecto, ya que es donde generalmente se comenten los errores y por ende los costos se elevan, la correcta supervisión y la constante vinculación del proyectista en la construcción es esencial para dar solución a todos los imprevistos que surgen en la obra.

Una de las ventajas que genera la contratación del desarrollo del proyecto ejecutivo y la construcción del mismo a una sola compañía, es que siempre habrá una constante presencia del proyectista en la fase constructiva del proyecto, lo cual disminuye considerablemente los errores y costos en la modificación de los proyectos.

Nuestra empresa al ser especialista en la construcción garantiza un apego real entre el proyecto ejecutivo y la obra terminada.